Durante el embarazo se libera una hormona llamada relaxina que permite el crecimiento del útero y la relajación de músculos y articulaciones. Evita movimientos que estiran los músculos abdominales demasiado, podrías sufrir un desgarro.
Evita posturas en la que tengas que recostada boca abajo por tiempos prolongados. Este tipo de posturas disminuyen el flujo sanguíneo hacia el útero. No es recomendable después del primer trimestre.
{module Yoga Prenatal|rounded|showtitle=1}